PROYECTO
Las EDAR convencionales son estaciones de alto consumo energético que no recuperan nutrientes. El objetivo del proyecto LIFE NECOVERY es aportar soluciones para revertir este hecho
CONTEXTO
Actualmente, los procesos de tratamiento de las EDAR se basan en sistemas aeróbicos que emplean mucha energía para generar fangos de baja calidad, así como niveles bajos de nutrientes inmovilizados, de modo que el valor inherente de las aguas residuales se pierde casi por completo. Hoy en día, el tratamiento que se emplea con mayor frecuencia en las EDAR es el sistema de fangos activados (SFA), un proceso que consume mucha energía. Durante los últimos años, este sistema se ha vuelto más complejo, por lo que cada vez requiere un mayor consumo energético. Además, los últimos avances orientados a la eliminación de nitrógeno, así como el deseo de reducir al mínimo la producción excesiva de fangos, han permitido crear sistemas que emplean más aireación extendida.
Desde el punto de vista del consumo energético y la recuperación de nutrientes, se han identificado las consecuencias siguientes:
— Se necesita más aireación y, por tanto, se consume más energía.
— Se crean menos fangos digestibles y de peor calidad, lo cual lleva a una recuperación energética desfavorable.
— En lo que respecta a la recuperación de nutrientes en la línea principal, las EDAR se concentran sobre todo en su eliminación y no en su recuperación.
Según lo expuesto, existe una necesidad de encontrar soluciones y ofrecer estrategias y tecnologías capaces de cambiar el concepto actual de EDAR para que pasen de ser centros de alto consumo energético a centros de recuperación de recursos. El proyecto LIFE NECOVERY trabaja en esta dirección para lograr aportar soluciones a este reto tecnológico y medioambiental.